¡Año internacional de la Agricultura Familiar: para un reconocimiento político de la eficiencia y de los resultados de los agricultores campesinos!
A pesar de ventajas considerables, la agricultura familiar debe enfrentarse demasiadas veces a exclusiones persistentes respecto al acceso a los recursos naturales y a los servicios. Además, su vulnerabilidad frente a las crisis económicas y climáticas, a las políticas de libre comercio e inversión, tanto como su vulnerabilidad frente a la inestabilidad de los precios, son tendencias fuertes que se mantienen. Se traducen muchas veces por la pobreza y la inseguridad alimentaria y nutricional de numerosas familias campesinas en los países del Sur. Sin embargo, lejos del arcaísmo que aún caracteriza a algunas de ellas, las agriculturas familiares y campesinas son promotoras de innovaciones y de modernidad para enfrentar los desafíos del siglo XXI: alimentación, clima, energía, medio ambiente, empleo.
El Año Internacional de la Agricultura Familiar (AIAF) promovido por las Naciones Unidas y Francia es la ocasión de recordar que aquellas agriculturas son demasiado aisladas cuando ya demostraron su eficiencia y sus resultados. Este año debe ser una oportunidad para tomar decisiones políticas fuertes por parte de los Estados y de las organizaciones internacionales, con el objetivo de luchar contra todas las formas de exclusión que afectan más que nunca a los agricultores campesinos a través del mundo.
Este documento fue redactado por AVSF, miembro de la Comisión Agricultura y Alimentación (C2A) de “Coordination Sud” : reagrupa a las ONGs de solidaridad internacional que obran en pos de la realización del derecho a la alimentación y de un apoyo reforzado a la agricultura familiar en las políticas que revisten un impacto sobre la seguridad alimentaria mundial.