Género y empoderamiento de las mujeres en las agriculturas campesinas e indígenas en Centroamérica
La reflexión sobre la situación de las mujeres rurales y concretamente sobre el papel institucional que AVSF debe jugar con respecto a esta temática, comienza a producirse como consecuencia de dos situaciones. Por un lado, por las dificultades para abordar las necesidades específicas de las mujeres rurales en un contexto que tiende a fragilizarlas aún más. Estas dificultades denotaban una ausencia de elementos conceptuales para entender la situación de las mujeres rurales y su consecuente papel en la famosa construcción social del mundo campesino, referente central del proyecto político institucional. Por otro lado, en América Central, desde los años 90, los movimientos de mujeres y los movimientos feministas han tratado de provocar una reflexión de sociedad sobre la situación de las mujeres y han situado el debate en términos políticos.
No se trata de trabajar con mujeres y de desarrollar una serie de recetas metodológicas para hacerlo. Se trata de entender un modelo de dominación (de relaciones de poder) y desde este análisis construir alternativas. Por lo cual, un desafío institucional de AVSF era situar las cuestiones de las mujeres rurales, en el marco de la reflexión sobre las agriculturas familiares como un desafío de sociedad. También llevar a cabo una reflexión colectiva sobre la situación de las mujeres rurales, su contribución a las agriculturas campesinas, e identificar algunas líneas de acción concretas a partir de una definición del concepto de “empoderamiento de las mujeres rurales”.
Preparado por el equipo de AVSF en América central con participación activa de las organizaciones socias en Centroamérica, el presente documento presenta tres aportes importantes: el primero es un breve análisis de la problemática del mundo rural desde una perspectiva de equidad de género articulado con un abordaje conceptual del enfoque de género. El segundo aporte enfatiza sobre los objetivos de equidad de género; se focaliza en la importancia de la transversalización de género, el empoderamiento de las mujeres rurales y el rol que asumen en el combate a la desigualdad social y étnica. Finalmente, se comparten las estrategias y experiencias que resumen los alcances del trabajo realizado en los últimos años. Son significativos porque muestran las buenas prácticas realizadas, así como los obstáculos encontrados.