Por AVSF, Pierre Du Buit, Responsable del Programa de Organizaciones y Mercados Agrícolas y responsable del grupo de trabajo «Juventud Rural».
Potencial no utilizado
En África Occidental, 2 de cada 3 personas tienen menos de 25 años. Estos jóvenes representan una fuente de innovación y esperanza, siempre que invirtamos en su potencial. Sin embargo, los jóvenes de los países del Sur suelen sufrir discriminación, carecen de acceso a los medios de producción y están infrarrepresentados en los órganos de decisión, en beneficio de sus mayores. También sufren la falta de programas específicos y tienen pocas oportunidades de expresarse. Entre las dificultades para establecerse, la dureza del trabajo, los bajos ingresos y la falta de oportunidades en los sectores agrícolas, muchos jóvenes se alejan del campo para probar suerte en la ciudad. Este éxodo rural priva a los territorios de la creatividad y la capacidad de cambio de los jóvenes, que podrían responder a los retos de la seguridad alimentaria, el cambio climático y la preservación de los recursos naturales.
Crear soluciones juntos
Ofrecer perspectivas a los jóvenes de las zonas rurales está en el centro de las preocupaciones de AVSF y de sus socios. Para apoyar lo mejor posible la integración socioeconómica de los jóvenes en los países en los que trabajamos, es esencial escuchar sus necesidades específicas. Ofrecer soluciones «llave en mano» no tendría sentido, ya que las situaciones y trayectorias varían mucho de un territorio a otro. Considerar a los jóvenes como socios de pleno derecho y hacerles partícipes del desarrollo y la aplicación de los programas que les están destinados es la base de nuestro planteamiento. Garantizar un futuro a los jóvenes significa también actuar en el entorno social para cambiar la percepción de su lugar y su papel en la sociedad, con el objetivo de integrarlos mejor en los órganos de representación y decisión.
Actuar en el sur
Para dar a los jóvenes los medios de prosperar en su región, AVSF trabaja ante todo en el atractivo de los sectores agrícolas de la región. La mejora de las rentas, la reducción de las tareas penosas, la facilitación de la instalación y del acceso a la financiación y a la tierra son palancas que contribuyen a hacer más atractivas las profesiones agrícolas y ganaderas para las nuevas generaciones. Esta labor debe ir acompañada de una formación técnica de calidad que permita a los jóvenes adquirir los conocimientos necesarios para producir y vender alimentos sanos en cantidades suficientes, en condiciones respetuosas con el planeta y los recursos naturales. Para que sus actividades sean lo más viables y rentables posible, AVSF también desarrolla y refuerza sus competencias en ámbitos transversales como el espíritu empresarial y la puesta en marcha de proyectos económicos, la gestión financiera, el comercio y el liderazgo. Por último, nuestras acciones pretenden crear empleos decentes agrícolas y no agrícolas. A medida que desarrollan sus actividades, las organizaciones de agricultores se profesionalizan en ámbitos como la producción previa y posterior, y necesitan nuevas competencias para servir a sus miembros (logística, gestión, contabilidad, marketing, etc.).
… pero también en Francia
Aunque la mayoría de nuestras acciones tienen lugar en África, América Latina y Asia, también actuamos en Francia para sensibilizar al público en general y a los escolares sobre los retos de la solidaridad y la agricultura campesina. AVSF considera que la Educación para la Ciudadanía y la Solidaridad Internacional forma parte integrante de su misión. Cada año, sensibilizamos a más de 1.600 alumnos, de primaria a secundaria, los futuros ciudadanos del mañana.
Con su sed de cambio y su capacidad para asumir riesgos e innovar, los jóvenes son un activo esencial para construir las zonas rurales del mañana. Zonas resistentes al cambio climático, social y económicamente estables y autosuficientes en su producción alimentaria.